Joaquín Sabina! Un Maestro

Joaquín Sabina! Un Maestro

Una Versión Artistica y Gráfica del Orgasmo en Las Mujeres.

Una Versión Artistica y Gráfica del Orgasmo en Las Mujeres.

Virtualismos

He tratado de esparcir tu memoria atraves de mis oniricas imagenes,

besando la tersa piel que nunca me has brindado,

acariciando los labios desconocidos de mi amante virtual.

Comparto pensamientos mientras los sirvo en una bandeja de entrada que me indica 250 mensajes no leidos,

atribuidos al ocioso tiempo que utilizan los canibales devoradores,

aquellos que deleitan sus aberraciones en la soledad de sus habitaciones.

He de poseerte mi amante virtual, con impero cada noche sobre mi almohada,

convirtiendo orgasmos en insomnicos momentos que inspiran el lapiz y el papel con los que mancho mi existencia.

''Los ojos vacíos corrompen el rojo con eróticos susurros en la nívea noche''

Némesis.

Virtualismos

:3

Sólo son hojas secas...

muertas,

que se posan sobre los rededores de las alcantarillas...

Los ojos vacíos extienden su frialdad sobre el occiso felino que descansa en la corriente húmeda,

aquella que danza con el gato dormilón tratando de atrapar su alimento entre hilos oniricos eternos,

Pero la multitud se rehúsa a detener el tiempo para admirar la muerte que se ha llevado la quebrada cuesta abajo.

Némesis.

:3

Número Equivocado!

Una extraña llamada a las 10 PM fue el detonador que 
imploraba en sus mas oscuros deseos, aquella peculiar línea telefónica dio un giro de 180 grados, cuando una voz masculina empezó a gemir al otro lado y a hacer preguntas cargadas en sopor excitadas por cuerdas vocales que hacían eco en su propia habitación,…
Se quedo atónita al escucharlo, cierto asco se produjo, ese que te carcome las huellas dactilares,

Ella iba a colgar pero cierta curiosidad carcomía sus entrañas y decidió darle una oportunidad a esta nueva experiencia que al fin y al cabo ella se impedía como chica complaciente, matando sus apetitos, asesinando y mutilando su yo animal que la convertía en otro robot consumidora, frígida y calculadora.

Sentándose sobre la cama sintió una humedad que invadía sus pantaletas de color rosa, sus largas piernas aflojaron como un tornillo apretado complementando la conversación de ese par de seres lujuriosos. Él le preguntaba, donde deseaba que la tocara, y ella mordía sus labios como tratando de encapsular las palabras, 
no puedes luchar contra esto se dijo así misma, y respondiendo la pregunta de él, le dijo que le apetecía que le acariciase el clítoris con impero y que centrase su lengua en forma de tornado sobre su vulva,

Entonces ella sintió que él se puso mas frenético haciendo lo único que calmaría su éxtasis… tocarse e imaginarse que aquel extraño ser hacia lo que ella quería, lo que ella anhelaba.

Sus pezones rígidos, sus nalgadas apretadas, el corazón palpitante con una aceleración estrepitosa y su voz entre cortada que gemía y susurraba mordiscos, apretones, lamidas… y  ‘’caricias’’.

Él se sentía firme y duro al ver la reacción de aquella damisela desconocida que por casualidad decidió con marcaciones de botoncitos rojos, crear una situación al azar, no tenia mucho que perder, siendo ese día el de su suerte…

Un par de humanos que esconden oscuridades en las noches de luna llena, mientras en las mañanas comparten una rutina similar: despertar, desayunar, trabajar, almorzar, llegar a sus vacíos hogares donde nadie les espera.

Cientos de pensamientos y represiones que una vez más les ha brindado la sociedad,

Pero esta vez se había encontrado, se habían dado sexo mutuamente, en una situación inconcebible por las reglas de su comunidad.

Quedaron en volver a escucharse al otro día a la misma hora, el placer les había invadido las neuronas, y al otro día hicieron lo mismo de cada amanecer, con excepción que esta vez no veían la hora de que el día llegase a su final para poder llamarse y ‘’penetrar’’ la conversación.

Ella entro a su apartamento ansioso, eran las 8 PM y debía descansar un rato, comer… desnudarse, como hacia siempre.

Él tuvo una erección al momento de colocar la llave sobre el cerrojo de su puerta, se apresuro a abrir, eran las 8:02 PM, se deshizo de su ropa disponiéndose a entrar a la cocina y tomo una cerveza de su Refri, puso la caja de comida thai en el microondas, prendió la TV para calmarse un poco y no malgastar su energía.

Mientras ella…. No sabia que hacer el teléfono le parecía demasiado tentador que hasta el pollo a la pimienta que había preparado ya estaba a medio comer
y ella sentía un hastío, así que para matar esas dos malditas horas se sirvió un trago de whisky y prendió un habano, para alivianarse y enviciarse en un aire de nicotina alicorada, solo llevaba unas pantaletas y una camisilla grisácea que la hacia sentir muy cómoda.

Van siendo ya las 9:55 y el tic tac se hace lento con cada parpadeo,

Ella toma el teléfono procurando dar remarcado a su aparatito, se escucha un timbrar torturador lleno de emociones…

Suena el teléfono y él impaciente lo contesta: Buenas noches afrodita mía!

Iniciándose así una nueva experiencia de gemidos. Ella le dice que tome su pene con audacia, que lo haga subir y bajar con suavidad

-hazlo mas rápido- -no te detengas- mientras ella se toca frenéticamente su vagina humecta toda su mano en proporciones enormes,

Él le dice que toque sus pezones que los apriete, y ella lo hace surgiendo de sus labios un quejido que hace que él procure mas velocidad a sus movimientos onanicionales…gemidos, sudor, sangre que circula con velocidad, hasta el punto que los dos consiguen entrar al orgasmo a aquel lujurioso estado que les permita una inmersa felicidad y miles de endorfinas empapan sus genitales.

Némesis.

Número Equivocado!

Poesía Erótica

La pintura espectadora de movimientos sutiles que acarician la piel sedante de sus cuerpos,
En un conjunto de feromonas bañados por el sudor y la saliva de sus osculos;
Falos erectos, vulvas húmedas, clitoris extasiados esperan ser devorados por la pasión aprisionada que surge con violencia cada segundo;
Sus ropajes son tersas pieles que abotonan poros exudantes de lujuria,
pezones rosados mordidospor bocas ansiosas de cerezas y fresas en chocolate…
orgia en besos que distorsionan la realidad haciendo que la pequeña muerte,
ese pequeño abismo placentero se convierta en el sentimiento de ausencia y tristeza del deseo;
reposan estos cuerpos entre un hedor de sexo que hastía,
dejando la unica solucion: encender un cigarrillo para esparcir en el aire esporas de nicotina acompañadas de un inmenso recocijo;
sus dedos sostienen con firmeza el cigarrillo que finaliza el usufructo de la penetración.

“dibuja recuerdos, penetra con bizarría impero la imagen vacia de su amada”

Némesis.

Poesía Erótica

Una de mis muchas aberraciones....

PREÁMBULO

No siento las lágrimas que regurgita mi dolor…
Desesperan mis entrañas, hacen que mi aliento congele mis venas que aún están abiertas;
Pinto con sangre azul las paredes de mi habitación, que envuelve la luz con locura;
En el instante que me arranco la piel a mordiscos un voyeur observa con bizarriedad lo furtivo de mi acto;
Se masturba con gran impero como esperando a que la muerte se tropiece con sus profundos ojos vacíos… agujeros negros… agujeros negros…se hace el tiempo con lentitud libidinoso cuando mi alma expira por última vez;
El semen cae como una bala sobre las sabanas arrugadas que viven entre sedas de pieles lujuriosas,
Sus ojos miran mientras el orgasmo explora sus nervios.

ABERRACIÓN: La onanición Masculina.
Ese día Dero quizo conocer los pequeños placeres que su cuerpo le brindaba así que se dispuso a penetrar la habitación donde nadie le molestaría: el baño;
Sentado sobre la taza fría del sanitario comenzó a idealizar en su mente la desnudez de la mujer lujuriosa que se había estacionado en su memoria (con lo ojos cerrados),
Y su miembro endureció como si se hubiese presionado un botón para activar,
Su mano tomo los 18 centímetros de músculo y testosterona e inicio la ardua labor de acariciarlo arriba… abajo… arriba de nuevo abajo… excitado su cuerpo correspondía con gran fervor transmutando en gemidos susurrones que le permitían liberar su afable alegría.
Su cuerpo se contraía, danzando con el deseo haciendo que la oscilación de su falo se acelerara con rapidez-persevera con fuerza,
Se siente cada vez más absorto, se siente cada vez más cerca de sublimar el des-abrigo de sus evocaciones presintiendo la presión,
Sus nervios le permiten la copulación final convirtiéndose en la explosión de sensaciones previas al re-encuentro con el orgasmo que detiene el tiempo para que la eyaculación sea más húmeda;
Brotando con vehemencia la receta de sus frustraciones y opresiones desatándose de ellas a través del sube y baja de su pene.

Némesis

Una de mis muchas aberraciones....

Frustraciones y otras demencias.

FRUSTRACIÓN

Redecoro las fisuras de mis venas mientras visito los confines de mi habitación, haciendo que la migraña reconforte el profundo dolor que mitiga la ausencia de mi dualidad adyacente, perdiendo el sentido de la imaginación me encuentro entre la demencia de la espera… La eterna locura de la expectativa,
Me aburre la sola idea de ansiedad así que,
Decido remendar mis arterias para seguir viendo TV.

Némesis.



FRUSTRACIÓN 1

La impotencia se convierte en virus la cual se ve obligada a halar del detonador, pero su memoria le ha fallado como de continuo, olvidando haber comprado la reserva de balas para rellenar el acero de su arma determinando su muerte;
Pero ahora el patetismo ha pintado esa súbita imagen:
Ella sentada sobre el diván con el revolver invadiendo su preciosa boca, deseó regurgitar el ácido sabor que probaban sus papilas con la saliva húmeda pronunciaba palabras de color rosa que memorizaban sus cuerdas vocales;
Respondió al llamado de su madre el cual le indicaba a Selene que la cena estaba servida,
Y con un gesto en cámara lenta deposito el revolver sobre la casita de las muñecas abandonadas.

“la cámara no miente aun así cuando engaña”

Némesis.


FRUSTRACIÓN 2

Bajo el puente miles de automóviles coloreando el pavimento… la calle sostenía una avenida atestada de sonoros cláxones que producían la demencia de la espera.
El de los ojos vacíos divisaba el cielo lluvioso que no permitía que sus ojos entreabiertos se deleitasen de la fachada del caos, cómo añoraba que fueran las 6:01 de la tarde para atreverse a saltar, mientras la cobardía lo enviciaba, su contraparte le gritaba al interior de su pecho: hazlo! que mierda!
y su cabeza se enredó como una tela de araña donde no atrapaba nada;
Pensó:
- Las probabilidades de que salte y no muera son muy pocas pero si quedo vivo-en silla de ruedas, puedo por fin ganar una carrera a mi hermano mayor del colegio hacia casa…
Mientras terminaba de digerir sus desarraigados pensamientos, una gaviota extraviada que luchaba contra las gotas de lluvia atrajo un rayo y el de los ojos vacíos observo como planeaba aquel rostizado cadáver sobre el capó de un BMW rosado, produciéndole así una risa enferma con la cual decidió regresar a su casa para darle la medicina a su abuelita.

Némesis.

Frustraciones y otras demencias.

27-10-09

Los tubos plateados que sostienen las paredes se estremecen con el dolor que hace crujir los huesos anatómicos de aquella que ha parido una generación y las pastillas anti-inflamatorias alivian el predispuesto muscular;
Su enfermedad agrava cada segundo con la amargura vomitiva de sus poros;
Digiriendo el diclofenaco de mala gana convierte sus jugos gástricos en exterminadores temporales de ansiedad;
El cuerpo del huésped se rehúsa a sentir pero el insomnio desvelador eternaliza en alucinaciones oníricas la realidad nocturna, aún persiste el doliente sentimiento yaciendo en un tálamo donde delira la ausencia del amor.

“Me laten las manos mientras des-hago la piel de miles de jengibres con la cuchara”

Némesis.

27-10-09

Entre Caníbales.

La demencia de permanecer en el parpadeo temporal de los ojos vacíos causa la humedad de color rojo que ha penetrado la cuchilla de afeitar;
El voleteo de la mariposa ha creado el caos entre los caníbales que el martes estaban hambrientos de almas infantiles;
Aquellas jugueteaban en un laberinto sin salida mientras una voz palpitante gemía:
“déjame ser tu secreto”… desvaneciéndose en ecos retumbantes en las fosas comunes que habitan los caníbales.
El llanto persiste entre la bruma de un callejón donde se esconde la escoria viceral de las calles caóticas por donde los traseuntes suicidan sus pensamientos evitando el roce anatómico con sus equivalentes contrarios.

Némesis.

Entre Caníbales.

15

La bailarina ha dejado tales huellas fantasmales sobre la sedante arena, sus manos permiten colorear de visos multicolor las alas de una mariposa, pequeña niña de incandescendente corazón jugueteas entre jardines de destellos carmesí donde palpitas entre onirismos permanentes;

Aún tu esencia no se desvanece posándose entre escenarios coloreados de trébol;
Ay hermosa niña tu corpórea forma yace bajo el hermoso manto de nuestra madre naturaleza, aquella que te abriga con delicadeza entre susurros dormilones del viento.
Danzante saltarina aparécete en mis sueños para que develes los misterios del universo através de tu sonrisa.

Dedicatoria: Para la Tita, la Bailarina, para vos Isabel!

15

Bondage

Ella acarició el pene con gran audacia para alimentar el fetiche exhibicionista de él, el de los ojos vacíos,aquel que respondió el afecto mordiendo los pezones por encima de la blusa-transparente que dejaba ver todo los encantos de aquella Afrodita de nívea piel;Su olor expedía un olor a sexo y chocolate que enloquecía al de los ojos vacíos, el cual exploraba posando besos sobre el vientre de su amada;
Su pene se convirtió en solido que palpitaba sobre la vulva femenina. Sus pieles envueltas entre la seducción del experimentar decidieron juguetear un poco con la soga satiniana que colgaba detrás del armario, la que estaba destinada al bondage, ese pequeño deseo deleitaba la mente de ella;
Sus labios pronunciaron la chispa de la excitación haciendo que él se pusiera mas firme; él comenzó la lujuriosa labor de atar el extremo del tobillo derecho de su Venus Afrodita marcando aquel hermoso cuerpo con la cubierta delgada de la herramienta libidinosa.

Juguetearon con el sadismo que ha inspirado vestigios lineales sobre ella, la cual es penetrada por el de los ojos vacíos, permitiendo que la danza sexual acaricie el punto mas intenso de ella; enloquece con los mordiscos atribuidos a su permeante cuello excitando su columna vertebral, que da paso a los estímulos nerviosos morbiendo el cuerpo femenino el cual inspira la petit mort sonrojando sus pezones, mientras el de los ojos vacíos admira el clítoris de su amada con besos húmedos irrigadores de sangre; liberando placenteras endorfinas que finaliza con otro orgasmo desgarrador de risa.
De aquellos dos lujuriosos cuerpos sólo queda el sudor, el semen y la saliva que rememoran el cuadro sexual de sus actos bondagicos.

"Deseo seducirte con besos de chocolate, anhelo excitar tu anatómico cuerpo adicto a mi dulce agonía"

Némesis.

Bondage

Capítulo #1. Un Laberinto Subrreal.

-Sí comprendo el motivo de tu enojo-
Pero Alicia no era del estilo de persona que implorara perdón, con sus silentes palabras daba por finalizado el pacto de la clemencia, así que se dispuso a desgarrar sus vestiduras frente a la vitrina-espejo donde ella deseaba poseer su venusiano cuerpo.



Alicia bebe de su taza de té simulando la elegancia de otra dimensión, mientras pensativa sus neuronas alertan el sorpresivo toc’toc de la puerta;
Su ojo izquierdo observa por una pequeña fisura;
Es ella su amante, la cual había asesinado la noche anterior.

Se desilusiono al ver fracasar su intento de acuchillar todos los recuerdos de lo acontecido la luna anterior y la imagen de ella através del oráculo de su portezuela pero luego ella hizo una aparición y Alicia vivió cada escena en carne austera.
Cuando abrió la rigidez de madera la invito con una mueca de estupor indicándole el diván victoriano donde las dos dispusieron sus cuerpos, luego hubo una fijación de miradas tratando telepáticamente desnudar sus pensamientos, el silencio se apodero del ambiente por un lapso efímero hasta que ella rompió la tranquilidad con sus venenosas palabras: Qué vas a hacer?
La pregunta azoto cada vez más los recuerdos haciendo que Alicia sintiera un nudo en la garganta, invadida con un deseo vehemente de regurgitar.

De su closet, ese que quedaba cerca al pasillo salía unos sonoros zumbidos que aterrorizaban el aire, Alicia puso sus blanquecinos pies sobre el piso de madera disponiéndose a abrir las puertecillas del mueble, una expectativa mordía su espina dorsal en una angustia que superaba su belleza.
Dentro estaba ella recostada sobre el fondo con el rostro adormecido y ligeramente helada, su piel era blanca con excepción de los miles de hilos de sangre que sobresalían de entre sus poros, vestiduras no poseía solo unas cuantas telarañas sobre sus rojizos cabellos, Alicia observo ese cadáver tan exquisito que la excitaba y la hacía recordar las imágenes criminales de la noche anterior y con mas deseos apretaba su labio inferior irrigándole la sangre en donde sus pupilas se convirtieron en una espiral de lujuria, tomándola, ese cuerpo sin vida que le despertaba caricias de muerte y cuidadosamente lo puso sobre la bañera, lo beso, lo observo, lo exploro, lo penetro y ella la miraba con repugnancia al ver tal acto de necrofilia, 
Ella misma reconoció su cadáver, pero ya era demasiado tarde, el banquete que había saciado la oscuridad de Alicia; así que fue al cuarto de herramientas tomo algo muy pesado pero era lo suficientemente fuerte para sostener con vehemencia su preciada pieza que culminaría su emoción.

Fue así como encendió la sierra y empezó a destajar con pasión trozos de carne, como bocados de orgasmo hechos añicos, ella seguía mirando a Alicia con un profundo odio, con un sombrío repudio y en su transparencia existencia un intenso temor que se apodero de aquel vivido fantasma.

Alicia continuo cortando hasta que en la bañera solo se divisaba una sopa de color rojo intenso, inspiro con desesperación saliendo del cuarto del baño y se escucho la estática de un cerillo, el olor a gasolina que salía del bidón penetraba sus fosas nasales, ardieron las llamas débilmente hasta que la potencia del oxigeno hizo su parte,
Tomo los pedacillos de carne mutiladas y los depositó sobre el violento elemento, apestaba como si estuviese en una esquina del infierno.

Introducción.

-Alicia esta sucia- se dijo así misma 
-Debes asearte- fue lo siguiente que pensó en voz alta.

Inmaculó su cuerpo manchado de sangre y mientras aromatizaba su feminidad observaba maravillada como el rojo se iba por el desagüe de su ducha, contuvo orgasmos recordando la felicidad que le brindaba el rojizo liquido, gimió barbaridades entre susurros húmedos y vicios. No conocía otra felicidad más liberadora que sus delincuentes memorias.
Culmino su odisea, se vistió de blanco pastel tomo las cenizas y las roció sobres las rosas que le recordaban dimensiones e identidades que algún día reunirían sus energías para hacerle visita las tardes de té en las cuales otra mas resurgiría de la sangrante semilla de sus actos.

Némesis.

Capítulo #1. Un Laberinto Subrreal.