Carme-Sí

''Un corazón desangrado en carme-sí''

Me pinto las uñas de color rojo para que beses mis labios,dibujo sobre los tuyos órbitas saturnianas invocando la lluvia para cobijarte en EL abrazo.
Un leve tic tac a-ritmo de dos cuerpos eleva la temperatura provocando deliciosamente un volcanazo invertebrado de endorfinas esclavizando caricias sobre pieles asesinas de timidez.
Aquellos rosados pezones devorados por una erótica boca masculina cómplice de ella-sus gemidos.
pupilas juguetonas, entumecimiento de nervios donde cabe solo la humedad de 4... tal vez 5 cavidades.
Besame ahora que he hallado partículas de mi rojo esmalte sobre tu espalda.

Némesis.

Carme-Sí

-[Vuelan las Violetas.]-

Y vuelan las violetas
Violadas por el viento olor jazmín,
Gozando y riendo;
Intocables e ignorantes de todo mal.

Ellas danzan en los aires
Orondas e imparables; libres,
Exponiendo lo increíble de su virtud,
En medio de lo esponjoso de las nubes.

Vuelan las violetas,
Girando y girando con gracias contagiosa
Mientras todos las miramos encantados y sonrientes,
Despertando un dejo de esperanza en nuestras almas;

Una esperanza de libertad;
Aquella que sólo ellas saben su significado,
Anhelo esperado al cual sólo las violetas que bailan al unísono que vuelan pueden acceder.

D´lacroix Alexander

-[Vuelan las Violetas.]-

Iba a ser Lilah, Pero es Violeta.

Extrajo una galleta con sabor a chocolate de su bolsillo contemplando la inmensidad contextual del libro sostenido por sus manos, Mr Abad entretenía sus pensamientos paulatinamente a su huésped de seis meses que albergaba su vientre, suspirando con fervor daba alaridos en los cielos, la increíble noticia que dejaba en detención y castigo el tiempo que despojaba las hojas de un árbol sobre la banqueta grisácea de un solitario parque, miles de preguntas, de decisiones, de suspiros multicolor que dibujaban sus cordones sobre aquellos zapatos cómplices de su letargo neural, le decían a ella que huyera con  todas las energías de una batería de carro.

Pero haber oído su latir de corazón le detuvo a compartir ‘’el olvido que seremos’’ y sentir como le insistía en su existencia atraves de pataditas y movimientos que le daban a entender que también estaba viva, cambiándole totalmente la perspectiva a la jovenzuela blanquecina, brindándole a las violetas una compañera más que aun el mundo no conoce, pero si siente.

Burbuja contenedora de ilusión y esperanza, Violeta se ha metamorfoseado en kilómetros de emocionantes días de espera que la acogen con amor, mi Violeta ahora que ocupas el lugar más importante de mi corazón, aguardo expectante para acogerte entre mis brazos y besos y jamás dejarte ir de mi lado… Te amo, hija mía! 

Nemesis.

Iba a ser Lilah, Pero es Violeta.

Capítulo #2 Rosa Pastel y Cerezas

‘’… Una leve brisa otoñal produjo su mirada mientras el abismo la acogía’’

Némesis

‘’Me gustan los tonos rosa pastel combinados con los grisáceos, para interpretar la armonía del Caos’’

Némesis.

Emma sentada o recostada sobre la orilla del riachuelo, homogeniza su par de manos para formar figuras de animales que se posan sobre la sombra verde que ilumina el sol. Se destacaba por ser una Hermosa niña de cabellos azabache que contaba historias a los arboles sobre princesas, castillos y monstruos; mientras se reflejaba sobre las estrellas subía alcanzaba una y la mordisqueaba entre perjurios endulzados .

Sus húmedos pies desvirtualizados por la corriente, juguetean con la cristalización de  las piedras. Su Delgado cuerpecito de diez años se posaba sobre aquella orilla cada día para subsanar los horripilantes recuerdos que su hermano le  incubaba meticulosamente.

La chiquilla hacia palpitar su Corazón con gran aceleración continua cada que su esencia percibía la humedad del agua.

Era aquel lugar la forma de suprimir por instantes lo que su hermano le producía: un asco envolvente de temor donde abarcaba sus demonios; los augurios del tiempo la convertirían en una bomba con detonador que iba activándose con cada perversa caricia de su hermano, como incitándole a movimientos en acciones no aptas para la corta edad de sus largos cabellos. La pequeña niña cruzaba palabras susurronas en su cabeza mientras le trataban de succionar las entrañas con vehemencia, luego se refugiaba en los recuerdos de las muchas veces que su madre jugueteaba con ella sobre aquel riachuelo, esos momentos de tranquilidad y felicidad eran los únicos que atesoraba con un desarraigo inmenso por el resto de la humanidad; luego se permitía deseos de transmutarse a sí misma en pequeños átomos de h20, aquel elemento acallaba sus pesadillas, apaciguando certeramente el dolor: la pérdida de su madre.

Aquella mañana se produjo un rompimiento en Emma al escuchar una conversación entre su tío y su perverso hermano mayor. Atónita, sin sonidos emitibles  por sus cuerdas vocales dejo que las lágrimas se ahogasen en un aire pesado. Al enterarse del sacrilegio cometido por su hermano contra  su queridísima y hermosa progenitora, en la cual causo un efecto suicida, sobre aquella alma perturbada que había sido vilmente penetrada con rabia, con odio y sudor.

Emma lanzo sus pisadas sobre el empedrado camino… su riachuelo la poseería era el único al que le permitía tocarla, acariciarla, poseerla hasta el punto del éxtasis que la transfería a una dimensión de humedad.

-¡Pequeña niña!  Pequeña niña acércate, píntate de multicolor y sumérgete en mi.

Escuchaba ella sobre el viento que visitaba a su riachuelo constantemente, no había comprendido aquel canto hasta ese efímero instante donde dio paso a sus sueños lujuriosos dejándose así llevar por el agua goteante.

Ahora flota bocarriba su locura, ahora Emma tiende a tararear entre las hojas de los arboles su terrorífica sonrisa.

Némesis.



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Capítulo #2 Rosa Pastel y Cerezas

Capitulo #3. Dulce Semiamargo Delirio.

‘’Arrancando la piel húmeda con un palustre y gotitas de acido sulfúrico’’

Némesis.

‘’Quid pro quo’’ pronunciaron sus labios frente a la esencia masculina vestida de una delantal con ínfulas de doctor,
Ella quería develar secretillos para esconderlos debajo de su piel y luego masacrar la psiquis vivida de aquellas miradas que Cruzan por casualidad.
El ‘’doctor’’ entumeció ante tal petición en latín que indicaba un intercambio de conocimientos para interactuar, creando así una relación, un vinculo de comunicación entre los pares
-reseñando de ante mano que Abigail había prolongado una ley del silencio por 6 meses y una actuación de zombie digno de un premio Oscar.
Ese día decidió desahogar su bondad relatando trazos con palabras en delirio.
Ella solo contaba con trece años cuando por causa y efecto de su entorno científico, ese que le brindaban sus progenitores, comenzó a experimentar en el desmembramiento de las alas de cuanto insecto podía atrapar;
Creía que la belleza se podía desprender y enfrascar debidamente para que su eternidad hiciera visos en el ultravioleta.
Al cabo de los años se identificaría positivamente con sus deseos pasionales hacia la ciencia o en otras palabras, al arte por rellenar el vacío que quedaba de setenta por ciento de cloroformo en especímenes con los cuales descifraba versos visuales.
Habiendo alcanzando la madurez de treinta años ya era reconocida por algunos en el campo de la entomología por su ardua dedicación y previos descubrimientos;
Aunque el trasfondo era mucho más inmerso, se jactaba en la intimidad de sus aposentos de la capacidad para ‘’destruir’’ los cuerpos de infantes que apenas contaban ocho años, y así creaba una gran melodía de ‘’bellezas’’ etiquetadas debidamente con códigos de barra,
Fue así como un delirio horizontal creó una bifurcación al permitir enamorarse de un hombre que fue el comienzo de su perdición,
Creía que el sentimiento vehemente que sentía hacia él, el cual se profesaban con reciprocidad le permitiría a él entender aquella bondad que le permitía a su amada sobrevivir;
Pero él estupefacto dio unos pasos hacia atrás ante tal descubrimiento bajo la suela de sus zapatos en un sótano frio,
En total desacuerdo con la realidad de aquellas imágenes, encerró en un cuarto blanco y acolchado la locura de su esposa.
¿Cómo termina esta historia?
No ha llegado a un final satisfactorio;
Abigail besa aun todas las noches su almohada mientras saborea su dulce delirio.

Nemesis.

Capitulo #3. Dulce Semiamargo Delirio.